Tape

Vuelvo con lo prometido.

Mientras espero a ver en 'La 1' Kiss Kiss Bang Bang que nunca he tenido la ¿gustosa? ocasión, y mientras otros hallan un Chaplin pro-guerra en falsos documentales, yo os voy a regalar una crítica de una filme curioso.

· Hoy He Visto CINE ·

Título original: Tape [2001]

País: USA

Duración: 86 (intensos) min.

Productora: Lions Gate Films

Director: Richard Linklater

Guión: Stephen Belder

Fotografía: Maryse Alberti

Género: Drama

Valoración: 7.3 sobre 10

Reparto: Ethan Hawke, Uma Thurman, Robert Sean Leonard

Info De: IMDb

John, un director de cine primerizo, visita la ciudad de Lansing (Michigan) para presentar su película en el festival de cine local. Vince, su mejor amigo del instituto también visita el lugar para apoyarlo en su gran día, o eso parece. John acudirá al hotel de Vince donde, tras una calurosa bienvenida y mucho juego dialéctico, pasando el tiempo en una habitación de un motel de Michigan diseccionando los dolorosos recuerdos de sus años de estudiantes, una creciente tensión empieza a apoderarse del ambiente hasta que Vince acusa a su amigo de algo que sucedió diez años atrás... [FILMAFFINITY]

Tape (o 'La Cinta’, que suena algo tétrico), es un drama. Un drama adulto y psicológico.

Un drama que parte comedido, con guiños humorísticos de un exquisito Ethan Hawke, para después recurrir a la memoria subjetiva, falseada, y así crear un marco de tensión donde se desarrolla toda una guerra dialéctica.

No es un filme exquisitamente realizado, pero rebosa humanidad, sin artificios. Mantienen la tensión con vueltas de tuerca sobre los heridos recuerdos de los personajes de un mismo suceso. Y siempre parece que todo va a explotar, se va a desmoronar y nos salpicará, pero no es así. Sin embargo, dejará secuelas.

Parte del relato de un solo acto, teatro volcado al cine, que no dejan de ser los orígenes del mismo. Aunque en esencia el marco es teatral, el director lo gestiona con sutileza, sin exceder ese recurso.
Fue rodada con planos secuenciales en tiempo real, en apenas seis días contando el montaje, pues la película salió del tirón en una sola noche, hasta el amanecer, en una desvencijada habitación de motel, con cámara DV y sin correcciones en el sonido.

Aunque la habitación es estrecha, parece universal por la peripecias del director y su cámara digital, y el suspense te sienta dentro del sucio sofá o de la cutre cama para ser uno más en el reencuentro de jóvenes que han madurado, unos más que otros, pero conservan el paradigma del pasado, una tergiversada compasión y la hipocresía inherente en todo humano adulto.

La banda sonora.

Es algo sencillo de explicar: no tiene, en absoluto. Y no necesita ambientar algo ya de por si bien ambientado. Sin elipsis, sin temas del Billboard Top 100 ni nada.

Robert Sean Leonard, el John en el film, no es otro que el archiconocido James Wilson de la serie House M.D. Fue compañero de cuarto del de abajo en el Club De Los Poetas Muertos, otro detalle curioso; ha hecho aparición en algún filme miedoso y era un secundario en el clásico de Martin Scorsese 'La Edad De La Inocencia'.
Como actor, sobra todo lo que yo pueda deciros. Si habéis visto la serie, es el más correcto actuando, y si veis este filme, os dará una lección de interpretación.

Un tipo que hace poco ruido, pero que lleva muchas nueces encima (el peor chiste del siglo... era el joven Claudio en dicha obra). Mención especial merece su desaire de desprecio, usado con frecuencia pero muy efectivo.

El tipo de la foto ya no es el rebelde guaperas de revistas de quinceañeras. Es un tipo comprometido, trabajador, y el drogadicto Vince en la película.
Ethan Hawke insistió en trabajar en la obra y eso se nota. Se come la cámara con sus excesos, pero para un traficante de medio pelo, es imprescindible hacer el tonto. Aunque se compenetra con sus compañeros de forma magistral, siempre sobresale su descaro.
Uno de los actores fetiche de este director, donde la relación ha regalado las mejores actuaciones de su carrera.
Es sabido que sus guiones circulan por medio Hollywood y siempre pone su granito de arena en cada una de las películas en las que participa...
Lo curioso es que a unos meses de acabar el rodaje de Tape, interpretó a Jake en Training Day y le valió una nominación al Oscar y el respeto de muchos compañeros de profesión.

He buscado la foto más photoshopeada de Uma Thurman por la sencilla razón de que no es guapa. Pero cuando decide actuar... nadie puede con ella.
Amy en la obra, es toda una mujer que ha superado sus problemas y trabaja para la Policía como ayudante del Fiscal, lo cual le otorga cierto halo de poder (no hasta el status de femme fatale); pero si lo tiene tan superado, ¿porqué es poli? Juega con sus muecas y en este corto filme se reinventa.
Volviendo la vista atrás, ha sido la actriz fetiche de Quentin Tarantino. No es necesario nombrar sus cintas, ni las comedias donde hace gala de una inteligencia casi nula.
Es otra de esas actrices que parece que nunca le llegará su Oscar, que ha pasado por muchísimos problemas, incluso psicológicos, pero que supera todo a juzgar por su constante actividad socio-política.

Aunque no hace acto de presencia hasta la segunda mitad de la obra, bien es cierto que cuando aparece, ante la incertidumbre del espectador, la arma gorda.

A Linklater lo descubrí en esta obra. Una semana más tarde, de camino en bus para un concierto de Dream Theater en Atarfe, me encontré con el drama romántico Antes del Amanecer... que me recordó a su primera parte, con los mismos protagonistas, cuando era apenas un niño. Desde entonces he seguido con absoluta asiduidad su obra, respetando cada inquietud del mismo, disfrutando cada pequeño o gran trabajo.
Es un maestro en lo suyo, líderes del movimiento de cine independiente estadounidense del cual no teme a grandes presupuestos, donde los verdaderos actores y las estrellas aburridas quieren dejarse caer para pasar a la 'otra historia' del cine, y sobre todo, donde los guiones priman sobre los galardones.

Es obligatorio verla en V.O. y sobre todo, no correr el riesgo de enjuiciar antes de tiempo sobre un tema tan peliagudo como el que se trata en la peli. Pero gracias a la sobriedad y al desarrollo in crescendo tendremos la oportunidad de estar del lado de todos, hasta del patán cocainómano de Vince.

La única coletilla que se me ocurre en esta ocasión es que "TODOS los recuerdos son subjetivos, con las consecuencias que eso conlleva".

Por cierto, el cartel es horroroso, pero el español es peor por su ansiosa frase-resumen, aunque el negro es más efectivo con el tema fílmico. Ya no se hacen carátulas como las de antes...

Un abrazo.

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