Hemos disfrutado de una fiesta bastante casera y tranquila, ya que algunas asistencias confirmadas se han ausentado. ¡A más tarta tocan!
Así que nada, os dejo unas fotos de la protagonista (no soy forofo de retratar cada segundo con mil disparos, pero alguna que otra ha salido bastante bonita).
Espero que los de Derechos Humanos no se me echen al cuello por publicar fotos de una 'menor', siendo esta mi propia hija.
Por cierto, el jueves llega mi T900, una de las mejores digitales de SONY, que espero cubra mejor las expectativas que mi anterior Pentax M40 o mi Olympus de gama media-baja. No obstante, creo que me pasaré pronto a las reflex... las fotos digitales están muy limitadas (corrosidad por luz, grano, enfoque...). No quiero recurrir a transformar el mundo que veo con la ayuda de Photoshop.
¡Saludos!
***